Aquí sí que pasan cosas extrañas

Comienzo por contarles que la serie que hasta ahora ha tenido más publicidad que un mundial de futbol (Netflix está acabando con todo). Su título le hace justicia porque definitivamente pasan cosas extrañas. Primero nos traslada a la década de los 80', donde los chicos llevaban vaqueros apretados y cabello empapado de laca, usaban Walkie-Talkie y andaban en bici por el bosque. Es casi imposible no ver la serie con un toque de humor aunque tiene un toque de suspenso y otras apariciones misteriosas que nos mantiene los ojos secos de no pestañear.

¿De qué va esto? un grupo de chavales Frikis (Mike, Dustin, Lucas y Will) se reúnen a jugar una noche por allá en el año 1983 y de regreso a casa Will desaparece misteriosamente, su madre Joyce (bastante nerviosa) comienza un operativo de investigación junto con Hopper (el jefe de la policía) y casi toda la comunidad. Sus amigos se niegan a pensar que ha muerto así que deciden colaborar con la causa y en la búsqueda conocen a una niña a la que llaman “Eleven” u “Once” con ciertas habilidades especiales que quiere destruir el laboratorio en el cuál fue tratada, al mejor estilo de Resident Evil, y también será la única opción para salvar a Will y  destruir a otras amenazas que provienen de una dimensión paralela.

No sabrán de primeras de dónde proviene Eleven y tampoco dónde está Will, pero cuando la madre

comienza a recibir "señales de vida" de él a través de luces la búsqueda toma forma y camino. Los personajes secundarios que también se unen a la expedición son, Nancy la hermana de Mike y Jonathan el hermano de Will, que a su vez buscan a Barb, la mejor amiga de Nancy que también ha desaparecido, A mí me gusta la ciencia ficción y esta serie la tiene en toda su expresión, monstruos llamados “Dermogorgons”, niña levantando autos con la mente y desintegrando a los malos, un pueblo de nombre raro con pocos habitantes ¿Qué más se puede pedir?

Han estrenado ya como regalo de Halloween la segunda temporada, que yo esperaba con ansias porque hace bastante tiempo que había terminado la primera y debo decir que esta vez no me desagradó, pero tampoco me encantó como la primera.

En esta oportunidad nos sumerge en un mundo más oscuro y extraño aunque seguirá el humor y los guiños al espejo, los niños se estiran rápido así que los verán más maduros y con mejores actuaciones, no hay sustituciones de personajes pero si caras nuevas, seguimos con “el mundo del revés” y esta vez se expande por todo el pueblo Hawkins.

Eleven se encontrará con su pasado y tendrá que salvar a sus amigos nuevamente de mal que los asecha, (con este vocabulario puedo escribir una novela de suspenso) Para no darles spoilers, les recomiendo que la vean, es muy entretenida, los personajes muy bien elaborados, las secuencias fenomenales, el vestuario y todo lo que está a la vista les gustará, seguro se unirán a la fiebre Stranger Things y esperarán como yo una tercera temporada, con esto… ya me cuentan.